3/1/11

EL LIBRO DEL SEÑOR

Shanna siempre dijo ser una bruja, su vestimenta era una mezcla entre darkie, hippie, gitana y pordiosera, usaba un velo negro sobre la cabeza, lo que hacia resaltar la palidez de su rostro y los ojos hundidos en unas ojeras negras, usaba una vieja mochila con extraños jeroglíficos y signos arcanos, por los pasillos de la Universidad Shanna hacia extraños signos con los dedos a los demás estudiantes según, para alejar las malas vibras, era cierto que había comprado algunos libros de hechicería en algún tianguis, y se había informado acerca de conjuros, pócimas y hechizos en Internet.

Algunos aseguraban haberla visto transformarse en gato negro, en lechuza, y Mateo, de la clase de Ciencias, juraba que lo había seducido con un extraño brebaje para que tuviera sexo con él, lo cierto es que todos conocían a Shanna, y más de cinco se burlaban de ella a sus espaldas.

Shanna lo sabía, pero no le importaba, solo le importaba convertirse en una poderosa bruja y callarle la boca a todos, la única amiga que se le conocía era Monserrat, aunque ella prefería que le llamaran Mortífera, metalera de corazón, siempre vestía con pantalones de mezclilla negros, playera de igual color con el nombre de alguna banda como “Slayer” “Metallica” o “Exodus” pulseras de cuero y botas de minero, de rostro era muy parecida a Shanna, aunque su complexión era más robusta que la de la flacucha pseudo bruja, mucho se rumoraba de esta amistad, algunos decían que se encerraban en la habitación de Shanna ha realizar conjuros y brebajes, que consumían drogas y mas de uno afirmaba que eran amantes, quizá algo de esto fuera verdad, quizá algo de esto fuera mentira, lo cierto es que Shanna estaba en boca de todos, de una u otra manera.

-Es momento de hacerlo- dijo Shanna de momento sorprendiendo a Mortífera, ella levantó la mirada del monitor de la PC de Shanna.
-¿De que hablas?-
-De llamar a mi Señor-
-¿No estarás hablando en serio?-
-Si, ya es hora, Él me dará el poder para vengarme de todos los que se han burlado de mí-
-Bueno, no se burlarían de ti si no llevarás esto de la brujería al extremo- respondió Mortífera con una sonrisa a medias, si, era cierto que eran amigas, pero Mortífera no creía del todo lo que se decía de Shanna.
-¿Al extremo? ¡Tu también piensas que soy un fraude!- exclamó arrojando su libro de hechizos de $20.00 que hojeaba al otro extremo de la habitación, tras la puerta y desde la cocina se escucho el grito de su madre, preguntando que pasaba, Shanna le grito de igual manera que no pasaba nada, aunque estaba bastante molesta con Mortífera.
-Mira Shanna, no creo que seas un fraude, pero tampoco creo que seas la bruja que dices ser-
-Eres igual que los demás, incrédula, lárgate de mi casa Monserrat ¡Lárgate!-
-Esta bien esta bien- respondió Mortífera levantando las manos como si estuviera siendo amagada por un arma, tomando su mochila y la chamarra del respaldo de la silla se acercó a la puerta.
-Ten cuidado querida- agregó al llegar a la puerta -Si llevas esto demasiado lejos puede acabar mal- y tuvo que evitar el libro que Shanna le arrojará, la puerta se cerró detrás de Monserrat y Shanna quedo sola.
-Idiota ¿Quién se cree que es? Juzgarme y advertirme, idiota… -

Shanna, viendo la PC encendida emprendió la búsqueda, pero por más que buscó no encontró nada concreto, solo supuestos conjuros y testimonios de dudosa reputación así como ciertas declaraciones de los tiempos de la Inquisición, nada que le sirviera en realidad.

Pasaron los días y Mortífera se disculpó con Shanna por lo ocurrido, siguió visitando su casa y Shanna le contó lo que había estado haciendo, le narró con lujo de detalles como pensaba que sería el encuentro con su Señor, Mortífera la escuchaba con atención, y de vez en cuando le hacia alguna pregunta y se emocionaba con lo que le contaba.

-¿Y en verdad es posible que tu Señor se presente? Es decir ¿Se presenta con todo aquel que lo invoca?-
-Si, así es, solo necesito un libro de magia verdadero con el conjuro exacto para hacerlo-
-Pero por lo que he leído en la Red, en la mayoría de los casos documentados por la Inquisición, las acusadas de brujería afirmaban que tenían que copular con Él para sellar el pacto ¿Estas dispuesta a tener sexo con… con algo como eso?-
-El precio es poco comparado con el beneficio, si, lo haría-
Mortífera ya no toco el tema, quizá la sola idea era demasiado para ella.

Pasaron los días sin nada en especial, hasta que una noche que Shanna navegaba en Internet recibió un mail, este era de una integrante de uno de los foros que ella frecuentaba, en el mail le decía que tenía en sus manos lo que ella estaba buscando, respondió el mail preguntando que clase de libro era y cuanto pedía por el, la siguiente noche recibió respuesta del correo en donde le decía que no sabía nada del libro, que había sido encontrado en una iglesia en Guanajuato hace ya muchos años, y que había sido de su familia por generaciones, que el libro no tenía precio por ser tan poderoso… le dijo que se lo obsequiaba.

Intercambiaron algunos otros mail y finalmente Shanna le proporciono su dirección, a los pocos días recibió un paquete, en la soledad de su cuarto lo abrió encontrando un libro que, para ella, era hermoso.

Grueso, más de 300 paginas, de un papel grueso, viejo y de color amarillento anaranjado, con un sutil olor a té, carcomido de las orillas y se notaba fácilmente que algunas hojas se habían perdido, su pasta era de cuero con ciertos símbolos grabados, algunos signos eran fácilmente reconocibles, los otros eran por completo desconocidos para ella, los textos eran una mezcla de varios idiomas, ingles, alemán, español y latín, tenía algunas laminas de aquelarres y personificaciones obscenas del Diablo y sus consortes, muchas de ellas de estilos diferentes, como de diferentes ilustradores, pero había una constante en todos ellos, la imagen de un hombre delgado, desnudo, excitado, pero sobre sus hombros tenía por cabeza la de un macho cabrio, en varias laminas se mostraba como asistía a los aquelarres, saliendo de una inmensa hoguera, copulando con las aspirantes a brujas.

A los tres días Mortífera llegó a casa de Shanna, cuando entró al cuarto Shanna escondió rápidamente el libro pero Monserrat noto inmediatamente el movimiento.

-¿Qué tienes ahí?-
-Nada- respondió molesta, cubriendo con el cuerpo el libro bajo la colcha.
-Oh vamos, déjame ver-
-Bueno, pero solo un momento- y sacó el libro, se lo dio a Monserrat quien lo tomó en sus manos con reverencia, con lentitud paso sus paginas mirando las laminas.
-¡Órale! Está padre, te ha de haber costado una fortuna-
-Pues de hecho no, es tan poderoso que no tiene precio, tiene que ser obsequiado-
-¡No manches! Aunque no le entiendo del todo, incluso los textos en ingles, no tiene sentido-
-Si, lo note, he traducido algo, es como si fuera ingles antiguo, quizá está escrito en clave, es como si fuera un compendio de hechizos-
-Pues si que te rayaste-
-Lo mejor es que pude traducir el texto que necesitaba-
-¿En serio?-
-Si, invocare a mi Señor-
-¿Ahora?-
-¡Claro que no! Necesito juntar todos los elementos, no será fácil-
-¿Pues que necesitas?- preguntó verdaderamente interesada.
-Primero un lugar apartado donde hacer la hoguera, después preparar las pócimas para alimentar la hoguera-
-¿Por qué no lo haces en aquella fundidora que cerraron? Ahí nadie te molestará-
-Si, es buena idea, lo haré entonces el sábado, ya que mis padres visitarán a mi tío, tendré todo el fin de semana para preparar todo-
-No puedo creer que en verdad vayas a hacerlo-
-Lo haré, y puedes acompañarme si gustas-
-¡No gracias! Esas cosas no son para mi, solo no me olvides cuando suceda-

Shanna dedicó la semana a juntar los ingredientes para las pócimas, algunos ingredientes era extraños y desconocidos, pero habiendo traducido las descripciones fue fácil sustituirlos, el sábado llegó y sus padres fueron a visitar a su pariente, en la cocina preparó las pócimas moliendo hojas y minerales, llenó varios garrafones con ellas y algunas horas después cargó todo en su auto, condujo hasta aquella fundidora y no habiendo nadie entro en el patio, llegó hasta un enorme bodegón y del auto sacó lo que había llevado, los garrafones, un poco de comida y combustible que había comprado en una tienda departamental, en su mochila había metido una linterna, el libro arcano y su ropa ritual.

Junto madera que encontró en el bodegón pero no encendió la hoguera, esperaría a que la noche cayera para hacerlo.

Cuando el sol se ocultó, cuando las estrellas empezaron a invadir el cielo nocturno y la luna estaba en lo alto empezó.

Coloco el combustible y encendió un fuego, lo acercó a la pila de madera y empezó a arder, tomó los garrafones y rezando sus oraciones vertió las pócimas en la pila, una lengua de fuego por poco la quema cuando salió furiosa de la pila, el color de la hoguera se volvió roja, con la segunda pócima se hizo amarilla, con ayuda de la linterna miraba el libro de vez en cuando y releía la oración, a la tercera pócima la hoguera se hizo lila, y con la última mostró un color azul, siguió con su ritual hasta que la última pócima fue vertida.

Dejó el libro a un lado y se preparo para el final, sacó de la mochila su ropa para el ritual el cual solo era una enorme capa con capucha, se desnudo por completo, aun cuando la noche era fría por la hoguera no sentía frío, se cubrió la cabeza y sosteniendo el libro inició las alabanzas y empezó a rezar los conjuros en latín cada vez más fuerte y excitada.

-¡Muéstrate! ¡Ven a mi presencia! ¡Yo te invoco! ¡Hazte presente mi Señor!- gritó elevando las manos al cielo, todo quedo en silencio, solo se escuchaba su respiración y la madera crispando en la hoguera.

Y nada sucedió.

Lentamente bajo los brazos esperando una señal, en su mente recorría todos los pasos que había hecho pensando que había omitido algo, empezó a sentirse como una tonta, cayó de rodillas y empezó a sollozar, entonces, a lo lejos se escuchó como si una enorme loza hubiera caído, agudizo el oído buscando el origen del ruido, pero lo que alcanzó a escuchar fue lo más parecido a pisadas que se acercaban, se lleno de miedo, se volvió y busco la linterna, los pasos se detuvieron cuando ella se movió, encontró la linterna y la encendió, recorrió el lugar y sus ojos se abrieron cuando el haz de luz iluminó un monstruoso ser, un hombre desnudo con cabeza de macho cabrio, la imagen duro un segundo, porque se movió rápidamente desapareciendo de su vista, Shanna se cubrió con la capa, sentada abrazaba sus rodillas y miraba a todos lados, los pasos volvieron a escucharse, intento alumbrase con la linterna pero esta ya no encendió, finalmente aquel al que había visto apareció al lado de la hoguera, era alto, delgado, estaba desnudo y sumamente excitado, gruñía y rodeando la hoguera llegó cerca de Shanna, esta, al mirarlo, empezó a dejar de tener miedo, se levantó dejando que la capa mostrara su cuerpo desnudo, se acercó hasta “eso” e intento tocar su rostro, pero un fuerte manotazo la hizo caer al suelo, Shanna cayó de bruces y fue sujetada por la nuca, su Señor hizo a un lado la capa y así la poseyó, una y otra vez, no había nada que Shanna pudiera hacer, aunque no había nada que Shanna quisiera hacer que no fuera complacer a su Señor.

La hoguera aun ardía cuando Shanna despertó, no había rastro de aquel al que vio durante su aquelarre, no sentía nada diferente en ella, se vistió, metió el libro y la linterna en su mochila, echo los garrafones en la cajuela del auto y salió de ahí.

El lunes por la mañana todo seguía igual, Shanna se mostraba igual que siempre aunque un poco más distante de lo normal, quizá esperaba algún síntoma o alguna señal de que el aquelarre hubiera dado resultado, por la tarde, cuando tenía unas horas libres, se metió a la biblioteca y tomando una de las computadoras para uso de los estudiantes empezó a navegar por sus paginas habituales, entonces le llegó un mensaje al celular, no conocía el numero, el mensaje solo decía [Abre sesión]

Extrañada inició sesión en el MSN y al momento se le apareció la ventana de aceptar a un nuevo contacto “Madame Night” decía el nick, le dio aceptar y apenas entró al MSN se le abrió la ventana de conversación del nuevo contacto, saludándola amablemente.

Madame Night [hola]
Shanna de la Barthe [hola, quien eres?]
Madame Night [soy la Señora de la Noche]
Shanna de la Barthe [ya, en serio, de donde me conoces?]
Madame Night [como lo pasaste anoche?]
Shanna de la Barthe [anoche?]
Madame Night [si, viste a tu “señor” no?]
Shanna de la Barthe [no se de que hablas]
Madame Night [si lo sabes, te tomó varias veces, verdad?]
Shanna de la Barthe [de que estas hablado?]
Madame Night [tu sabes de que estoy hablando, espero que lo hayas disfrutado]
Shanna de la Barthe [solo hay alguien que sabía de lo que estas hablando]

Y Madame Night cerró sesión, algunos escritorios adelante Shanna vio a Monserrat levantarse, se volvió hacia ella y le sonrió, salió y Shanna rápidamente fue tras ella, la encontró en uno de los jardines en compañía de Mateo.
-¿De que se trató todo eso Monserrat?-
-Bueno, si no me quieres contar me quedaré con la versión de tu “señor”-
-Y tu señor dice… - agregó Mateo -Que estuviste… fabulosa-
-No es cierto- dijo Shanna al tiempo que sus músculos se tensaban.
-Si Shanna, lo es, jamás invocaste a tu “señor” ese día que me corriste de tu casa y me amenazaste pensé que era hora de darte una lección, para que dejaras de hacer y pensar tonterías-
Shanna apretó fuertemente los puños.
-Tenía que saber que estabas planeando- prosiguió -Eso fue fácil, tu misma me lo dijiste, el historial en tu computadora me dijo un poco más, ya solo fue cosa de crear la identidad en el foro y mandarte los mails-
-¿Entonces… el libro no es autentico?-
-¡Claro que no tonta! Ahí fue donde Mateo ayudó-
-Si- dice Mateo -Verás… envejecer el papel fue fácil, solo es necesario sumergir las hojas en una solución concentrada de algún té, eso fue lo que le dio ese color amarillo anaranjado y el aroma, los textos los hice con un burdo traductor on-line, por eso no tienen sentido ¿La cubierta? Un favor de los chicos del Taller de encuadernación, y las ilustraciones fueron creaciones de tu amiga-
-Pero… la hoguera… y… y Él… -
-Aaah eso fue gracias a los materiales con que hiciste tus “pociones” al quemar cloruro de hierro el fuego se hizo azul, con el cloruro de litio se volvió roja, el cloruro de sodio ayudo a hacerla amarilla y el cloruro de potasio la hizo lila, y en cuanto a la personificación de tu “señor” fue gracias al grupo de teatro que me prestaron la mascara, bastante incomoda por cierto-
-Tu… ¿Eras él?-
-Si, desde hace mucho tenía ganas de estar contigo otra vez, pero sabía que te negarías, esa vez que lo hicimos estábamos ebrios, nada se compara con lo de anoche-
-Así que… Shanna querida, nada sucedió en realidad- y el labio de Monserrat se abrió cuando el puño de Shanna se estrelló en su rostro, desde el suelo Mortífera le lanzó una miraba, un tanto divertida pero también con coraje, Shanna dio media vuelta y salió corriendo de la Universidad.

Durantes los días siguientes Shanna desapareció de la Universidad, Monserrat no estaba del todo tranquila, por lo que Mateo acostumbraba acompañarla a casa.

-Gracias Mateo-
-Por nada-
-Ahora ya no se sabe con Shanna, esta completamente loca-
-Aunque… ¿No crees que fuimos demasiado lejos?-
-¡Ash! ¿Ahora te arrepientes?- exclamó un tanto furiosa.
-No, no es eso… -
-Ay ya cállate, nos vemos mañana, adiós- y subiendo los escalones desapareció detrás de la puerta, Mateo se alejó al tiempo que Monserrat entraba en su cuarto, arrojando la mochila en la cama llefó hasta la comoda, frente al espejo se miraba el labio, no había sanado del todo y aún le dolía, hacia una mueca por lo mal que se veía, pero un grito salió de su boca al ver lo que había detrás de ella, grito que fue rápidamente silenciado… por un hombre desnudo con cabeza de macho cabrio.

Sentada en la banqueta Shanna abrazaba sus rodillas, en su pecho descansaba un libro, miraba de un lado a otro la calle con una sonrisa maliciosa en sus labios, cuando regreso a casa ese día que la verdad fue revelada encontró otro paquete, era un libro muy parecido al anterior, uno que había solicitado después del primero, aunque este venía con un certificado de autenticidad en su interior.

Don't play with a witch by ~wishmaster3329